Además de cultivar flores, usamos ejemplares llamativos y delicados en espacios de gran circulación como la casa u oficina; los ramos, centros de mesa o arreglos en la recepción son los más usados, para brindar un ambiente natural en nuestros espacios, por esto debemos aprovechar de ellas y cuidarlas al máximo para conservar su belleza

Tenga en cuenta los siguientes tips para que estas aguanten más tiempo.

• Lo primero que debes hacer al comprar las flores es cortar el tallo. Toma un cuchillo afilado con hoja lisa (No tomar cuchillo de sierra, ni tijeras) y realiza un corte sesgado retirando de 1 a 2 centímetros del tallo.
  Asegúrate de volver a cortar un trocito del tallo a diario, asegurando que el tallo no se seque y la flor tome agua con facilidad.
• Se recomienda usar un jarrón de cristal, ya que los floreros porosos alojan mayor suciedad. Antes de sumergirlas asegúrate de lavarlo y desinfectarlo bien.
• No sumerjas las hojas en el agua. Al sumergir las flores retire la mayor parte posible de hojas para que estas no entren en contacto con el agua, ya que se desarrollaran bacterias.

• Añade al agua algunas sustancias que prolonguen su vida. Habitualmente viene un sobre de alimento para las flores con la compra de estas, pero también se usan productos como aspirina o azúcar disuelta en agua tibia para su alimento o para matar las bacterias que pueden estar en el agua.

• Ubícalas en lugares frescos, sin contacto directo del sol ni de corrientes de aire.

• Cambia el agua y el alimento de la flor cortada cada dos o tres días, esto mantendrá a las flores frescas.

• Retira las flores secas. Si hay una flor o un pétalo del ramo marchito, retíralo, ya que no solo dañan la estética del ramo sino que afecta el resto de las flores, por un gas que estas emiten.

Si las flores no las adquirió con el alimento, estos son algunos tips o recetas caseras que prolongan la vida de sus flores.

• Una cucharada de azúcar y una cucharadita de cloro (por cada 2 o 3 litros de agua). Lo que hace el azúcar es alimentarlas mientras que el cloro elimina las bacterias.
• Disolver aspirinas efervescentes (usa una por cada 2 o 3 litros de agua), esto oxigena el agua y no permite el desarrollo de bacterias.
• Aplicar el enjuague bucal (un chorrito), combaten la proliferación de hongos y bacterias.
• Hierve agua con miel y viértela en temperatura ambiente al florero y deja que los líquidos alcancen una temperatura ambiente. La miel es un conservante y fuente de azúcar para las rosas.

¡Disfruta de la frescura y belleza de tus flores!